FDV 78

Capítulo 78:

«A partir de ahora, no quiero que vuelva a acercarse a mí.»

Los hombros de Ignis temblaron. Entonces, como si ya se hubiera rendido, sus ojos húmedos evitaron su mirada.

«…lo siento.»

Luego de que el Príncipe haya pronunciado con dificultad esas palabras mientras se daba la vuelta, Celestine ladeo la cabeza.

Parecía como si estuviera llorando.

Vamos, no puede ser.

…o quizás sí.

Celestine se estremeció y luego entró rápidamente a la casa.

***

«Hermana.»

Selena, que había estado durmiendo hace rato, sintió como alguien sacudía su cuerpo y lentamente abrió los ojos.

«Me pediste que te levante a la hora de la cena. Ya oscureció.»

Blink, blink. Luego de parpadear, Selena se quedó viendo a la nada y lentamente se giró.

«¿Qué hora es?»

«Pasadas las 9.»

«Dormí mucho.»

«Debió haber sido porque estabas cansada. Duerme un poco más.»

«No, me voy a levantar.»

Selena bostezó y se sentó. Torció ligeramente su entumecido cuello, y luego lo masajeó para calmar su dolor.

«¿Qué es eso?»

La vista de Selena se había dirigido al bolso que Celestine sostenía. Celestine le respondió a modo de broma.

«¿Lo encontré en la puerta de la casa?»

«¿De qué estás hablando?»

«Hermana, mira.»

Le alcanzó el bolso y Selena lo abrió.

«¿Qué es todo esto?»

Dentro del bolso, estaba su espada, su uniforme y también habían monedas de oro.

Ignis estuvo aquí. Abruptamente, Selena se levantó.

«¿Viste quien lo dejó?»

Celestine observó por un momento a Selena, y luego sacudió la cabeza.

«No. Solamente vi el bolso en el suelo.»

«¿De verdad?»

«Si. ¿No me escuchaste?»

Celestine fingió que no sabía nada.

En realidad, estuve pensando mucho en decirle o no que me había encontrado con el Príncipe. Pero al final, decidí no decirle.

Porque mi hermana es de corazón blando, y seguramente se preocuparía por él.  Y luego se sentiría culpable. Tal vez estaba siendo demasiado extremista.

Pero, mi hermana siempre fue así.

Haciendo a un lado sus propios sentimientos y problemas, para poner en primer lugar a los demás.

Por eso, incluso si soy un tonto hermano menor, voy a evitar que te lastimes.

¿Cuántas personas salieron lastimadas por culpa de mi inmadurez?

No dejaré que pase de nuevo.

Celestine se juró que intentaría proteger a su hermana.

«En realidad, me había dado pena la espada. Que bien.»

Sin saber que era lo que Celestine estaba pensando, Selena murmuró con indiferencia.

Por supuesto, no era que no le importaba para nada. Estaba muy feliz de que a pesar de lo que ella había hecho ayer, Ignis viniera a visitarla. Pero ese era sentimiento que no debía permanecer en su corazón. Rápidamente, Selena lo borró.

Después de estirar su adormecido cuerpo, Selena se colocó la espada alrededor de la cintura. Bebió un vaso de leche y comenzó a prepararse para salir.

«¿Vas a salir ahora?»

«Uh. Debo ir a un lugar.»

«¿Llegarás tarde?

«Hmn…»

Ni siquiera sé si regresaré con vida, ¿cómo podría saber a qué hora volveré? Selena se rascó la nuca y brevemente chaqueó la lengua.

«Tal vez. No me esperes despierto. Cierto, el elfo vendrá de nuevo mañana por la mañana, así que asegúrate de ser cuidadoso. Ya sabes, ¿fingiendo que eres yo?»

«No te preocupes.»

Celestine dijo con entusiasmo, como si solo tuviera que confiar en él.

Eso solo la hizo dudar, pero no había nada más que hacer.

«Nos vemos.»

Selena se despidió saludando ligeramente con la mano, y se fue de la casa.

[Te visitaré tan pronto termines el trabajo.]

Recordó la respuesta de Ber.

***

Era el momento de la noche en que la luna se alzaba en el cielo estrellado.

Selena llegó al Ducado Index, y se escondió en la oscuridad.

No había tanta seguridad como pensó. ¿Por qué? Había escuchado que él era una persona muy cautelosa.

¡Tac!

Selena escaló un árbol. Y al observar desde esa altura, vio que la mansión del Duque estaba completamente vacía.

‘Es sospechoso.’

Selena frunció el ceño.

Tenía un fuerte presentimiento de que hoy no era el día adecuado. Pero qué más podía hacer, no podía regresar ahora.

‘Primero, debería entrar.’

Decidió que sería mejor saltar del árbol hacia las rejas. Y cuando estaba a punto de saltar, repentinamente, recordó a Ignis.

Cuando había que cruzar la muralla en Heath, Ignis no dudo ni un segundo para extender sus manos hacia mí. Luego apoyé el pie y salté.

Y cuando salté fuera del muro, y casi caigo, él me sostuvo en sus brazos.

¿Algún día podré olvidar la calidez que sentí en ese momento?

Selena dejó salir una risa vacía.

Solo habían pasado dos días. Es decir, que solamente habían pasado dos días desde que nos distanciamos.

Pero ¿por qué sigues apareciendo frente a mí?

Selena suspiró. Parece que definitivamente, me había encariñado. Pensando eso, volvió a concentrarse en lo que tenía en frente.

¡Tac! Selena saltó por encima de las rejas. Y escondió su cuerpo entre las sombras, detrás de una pared. Aunque, era poco probable que la atrapen porque no había nadie cerca.

[Hay una celda en el sótano del anexo, que está a la derecha de la entrada principal. Mis compañeros deberían estar ahí.]

Pensó en la nota de Ber. Si es a la derecha, entonces definitivamente es hacia allí.

En la celda debería haber tres personas. ¿Podré sacarlos a todos? Selena frunció ante ese sombrío escenario, pero rápidamente sacudió la cabeza.

No podía evitarlo.

Para poder ocultar la identidad de Letio, realmente no podía evitarlo.

Como había cortado lazos con Ignis, ya no importaba si Letio se volvía el Emperador o no. Pero su intuición le decía que ‘Eso no sería algo bueno’.

Además, parece que le había enseñado cosas extrañas a Celestine y…

Si ese tipo se vuelve el Emperador, podría retenerme.

Podría usar su autoridad como el Emperador para arrinconarme y controlarme.

No puedo quedarme de brazos cruzados.

El hecho de que él era un Príncipe tenía que permanecer escondido.

Y absolutamente, no lo hacía por Ignis.

Después de ese pretexto, Selena apuró el paso.

***

Chiiir.

Se escuchó el chirriante sonido al abrir la desgastada puerta de hierro.

Selena contuvo la respiración y lentamente, dio un paso hacia adelante.

En el camino, solamente había visto un par de tipos. El número de mercenarios que protegía la enorme mansión era demasiado pequeño.

Quizás el resto está reunido en algún lado. Selena había pensado eso y fue cautelosa, pero para su fortuna, no se encontró a nadie más.

‘Entonces, el motivo por el cual hay pocos mercenarios es otro.’

Era bastante obvio que después de lo que pasó en Heath, el Duque estaría rechinando los dientes.

¿Quiere decir que es la calma antes de la tormenta?

Selena chasqueó la lengua y entró.

La prisión era estrecha. Había solamente un espacio reducido en donde estaban las celdas, que estaban divididas entre medio por barrotes de metal, y una ventana del tamaño de un puño que se encontraba al final del pasillo. No había antorchas. Así que gracias a eso, el lugar se encontraba en completa oscuridad.

Le daba la sensación de que algo extraño aparecería de la nada. Selena respiró hondo y con cuidado, se acercó a las celdas.

«¿Hay alguien ahí?»

¡Bam! Tan pronto terminó sus palabras, una mano salió de entre los barrotes. Rápidamente, Selena se echó para atrás. Y como si hubiera sido una lástima no haber podido atraparla, regresó al interior de la celda.

«¿Quién eres tú?»

Escuchó una voz áspera. Al sentir la sospecha en esa voz, Selena le respondió en un tono suave.

«Soy amigo de Ber. Vine a ayudar.»

«¿Ber te envió?»

El hombre le pregunto, desconfiando aún más.

«¿Ese tipo tiene amigos? Hace millones de años que siempre está solo.»

Él si parecía no tener amigos. Tragándose esas palabras, Selena sonrió ligeramente.

«Bueno, somos lo suficientemente cercanos para mantener una conversación. ¿Acaso no es mejor considerarnos como amigos?»

Después de escuchar a Selena, el hombre se quedó en silencio.

Se quedó callado un rato y luego, el hombre se acercó lentamente a los barrotes. De a poco, pudo ver su rostro.

Como era un hombre alto, Selena tuvo que alzar la cabeza para mirarlo.

Sus antebrazos eran más gruesos que los muslos de Selena, y su torso se veía muy fuerte.

¿Cómo hicieron para atrapar a alguien de su tamaño? No debería subestimar a los mercenarios del Duque. Selena pensó.

«Él debe estar encarcelado en el Palacio Imperial.»

«Se escapó hace unos cuantos días. Me pidió que los ayude a salir.»

«¿Por qué no vino?»

«¿Cómo podría saberlo? Pregúntele una vez que salga.»

El hombre frunció el ceño. Ya de por si daba una mala impresión, pero ahora que había arrugado el rostro, se veía incluso más rudo.

«Tú.»

Él acercó más su cara a los barrotes.

«Eres el perro del Príncipe.»

¿Por qué todo el mundo me llama ‘perro’? Soy más parecida a un gato que a un perro. Ligeramente, Selena se encogió de hombros.

«Siendo más exactos, era el perro del Príncipe. Ahora que renuncié, soy solo un civil.»

«¿Renunciaste?»

«Si. Se dio de esa manera.»

Selena asintió con la cabeza y luego se agachó. Metió un delgado alambre de metal en el agujero de la cerradura.

En el pasado, había aprendido esto cuando caminaba por los callejones con el vecino de al lado, Hans. Ya había pasado mucho tiempo de eso, así que no se si funcionará…

Clic.

Escuchó un sonido y la cerradura se abrió. Después de todo, soy un genio. Porque soy buena en todo lo que hago. Mientras se halagaba internamente, Selena se levantó.

«Ya puedes salir.»

Pero el hombre no se movió. Solamente se quedó parado en su lugar y observó a Selena.

«¿Por qué confiaría en ti?»

Esa era una pregunta entendible. Pero Selena no tenía intenciones de darle una buena respuesta.

«Si quieres que el Duque te asesine con sus propias manos, entonces no me creas. Por cierto, si te quedas y mueres así, morirás en vano.»

«¡Desgraciado…!»

«No grites. Es peligroso.»

Selena agitó la mano.

«¿Acaso vine hasta aquí solamente para que te quedes? Solo cállate y sal. Escapa.»

«No sé qué es lo que pretendes.»

«No pretendo nada.» 

Añadió rápidamente.

«Porque soy un pacifista. Lo único que deseo es la paz para toda la humanidad.»

«…estás loco.»

«Me lo dicen a menudo.»

Entrecerrando los ojos, Selena miró alrededor.

«¿Dónde están los otros dos? Me dijeron que eran tres en total.»

«Hay uno aquí, y el otro está de aquel lado.»

Detrás de él, había una mujer. A juzgar por la cantidad de sangre que tenía, parecía que estaba herida de gravedad.

Al pensar otra vez en lo habilidosos que eran los mercenarios del Duque, los hombros de Selena temblaron ligeramente.

«Entonces sal por tu cuenta. ¿También tengo que hacerlo yo?»

«Eres un descarado de mierda.»

«Si. Estoy loco y además soy descarado. Así que por favor, salga. En este mismo instante.»

«…»

Él hombre miró a Selena con sospecha, pero como si se hubiera dado por vencido, dejó salir un largo suspiro. Y luego alzó a la mujer que estaba acostada a sus espaldas.

«Nos vemos. En un futuro te buscaré.»

«Haz lo que quieras. Pero…»

Velozmente, Selena sacó la espada enfundada de su cintura. Y la metió en la axila del hombre.

«La próxima vez que digas algo tan imprudente como antes, te mataré.»

TL: mawi

ED: Litten

No spoileen porfi (ɔ˘ ³ (ˆ‿ˆc)

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