FDV 37

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Capítulo 37:

05. Volviéndose la amiga del villano.

—chiiirr

Selena abrió la puerta y miró a Ignis entrar.

Celestine se escondió con Rose en el cuarto de al lado antes de que llegue Ignis.

Así que no tiene nada que atrapar. Selena pensó eso y tomó aliento.

«Dejé la comida en el patio delantero.»

Dijo Ignis mientras entraba. Selena sacudió la cabeza y se encogió de hombros.

«Sería aún mejor si lo hubieras entrado.»

«Desafortunadamente no traje a los empleados.»

«Lloraría de emoción si lo hubiera hecho usted mismo.»

«Detesto usar mi cuerpo.»

«¿Es así?»

Intercambiaron chistes a la ligera. Ignis pareció gustarle mucho la conversación y con una pequeña sonrisa, se sentó en el borde de la cama.

«¿Leyó el periódico?»

«Si, lo vi.»

«¿Alguien te lo trajo?»

Ups, Selena entró en pánico momentáneamente y luego recobró la compostura.

«El vecino de al lado, Hans, cuido de mí. Dijo que me vio en el periódico y me lo trajo.»

«¿…si?»

Ignis entrecerró un ojo. Y luego volvió a su expresión usual otra vez.

«Ahora ya no habrá nadie que no conozca el nombre de Sir en todo el Imperio. ¿Cómo te sientes?»

«Nada mal.»

«Eres humilde.»

Ignis le dio un golpecito en la frente con el dedo índice.

«Hay buenas y malas noticias. ¿Qué quieres escuchar primero?»

«Lo que más odio es tener que elegir. Por favor tome nota.»

«Está bien. Lo anotaré en mi libreta.»

Selena observó el rostro de Ignis. Por algún motivo, aunque estaba sonriendo, se veía un poco decaído. Algo debe de haber pasado. Selena apretó con fuerza las manos.

«Las cosas no salieron bien con el Duque.»

Lo suponía. ¿Index no era bueno para planear? Si lo atrapa, con eso bastaría. Selena sacudió la cabeza ligeramente.

«De todas formas, no esperaba que saliera algo de la boca del Duque.»

Ignis alzo las cejas y se encogió de hombros.

«Sólo pude retener al tipo que peleo contra ti. Podría hacer un daño considerable si revela solamente que el Duque se lo ordenó. Ahora está siendo interrogado.»

«Cuando habla de interrogación, ¿se refiere a tortura?»

«Lo que sea.»

Ignis volvió a encogerse de hombros.

«Igual no va a decir nada. ¿…quizás?»

«Si no va a decir nada, hay que hacerlo hablar. ¿No es así como funciona?»

Selena se rio a carcajadas. Luego chasqueó la lengua brevemente y volvió a hundirse en el almohadón que estaba apoyado contra la pared. Porque el dolor en su hombro había empeorado.

«¿Esta bien?»

Ignis le pregunto con una expresión de preocupación.

«Lo pregunta recién ahora.»

«¿Puedes moverte?»

«Puedo moverme, pero no puedo pelear. Y menos si estoy tomando remedios.»

«Te ves bastante bien para decir eso.»

Ignis le dio un golpecito en la frente de nuevo, enderezó su postura y se sentó. Hizo contacto visual.

«Entonces, ¿ya me dijo las buenas y malas noticias?»

Ignis sacudió la cabeza.

«Lo que dije recién son las buenas noticias.»

Selena sonrió como si fuera absurdo.

«Me preguntó qué tan malas serán las malas noticias.»

«Tuve una pequeña pelea con Padre.»

Esto. Selena arrugó la frente.

«Así que ambos estuvimos a punto de ser expulsados.»

«¿Yo por qué?»

«¿Por qué piensa que eres mi mano derecha?»

«¿Era así?»

Selena empezó a reírse. Pero Ignis no se rio.

Su boca estaba fija, y parecía algo amargado. Selena se tragó la risa que había soltado cuando vio su expresión.

«Pero viendo que está aquí, no parece un alma exiliada, ¿qué pasó?»

«Gracias al Archiduque Enoch, el castigo pudo ser evitado.»

«Tendré que agradecerle. Cuando todo mejore, le enviaré una carta a Ilea.»

«Hubo condiciones.»

«Esas son las peores noticias.»

«Tal vez.»

Selena estaba bromeando, pero Ignis no le devolvió la broma. Fue en ese momento que Selena empezó a sentirse ansiosa de nuevo.

¿Y ahora qué? ¿Qué pasa?

Como el problema pasó hace varios días, ahora se sentía desesperada.

«En dos días, iremos a Heath. Tú y yo, sólo nosotros dos.»

Maldición. Selena se apretó las sienes. El dolor de cabeza que ya le estaba molestando de antes, parecía haber empeorado.

«¿Algún otro escolta?»

«No habrá.»

«¿Algún mago?»

«¿Hablas de Rowan? Tampoco.»

«En serio Su Alteza y yo, ¿solamente nosotros dos?»

Ignis asintió. Pudo ver un poco de tristeza en ese movimiento.

Aún si es poco, se toma una semana para llegar a Heath. Dices que Ignis, el único príncipe del Imperio, tiene que ir todo ese largo período de tiempo con un solo escolta. ¿Qué es esta locura?

«Realmente se podría decir que está caminando hacia su muerte.»

¿No está diciendo directamente que lo va a asesinar?

Selena se limpió los labios con el dorso de la mano.

«Es que le gusta empujar a sus hijos hacia los extremos.»

«Es un pasatiempo noble.»

«Pienso lo mismo.»

Ignis alzó las comisuras en respuesta. Entonces abrió ampliamente sus brazos.

«Vamos, en un panorama así. ¿Qué debería hacer? Debería ir sin protestar.»

Ignis agarró el brazo de Selena.

«Te tengo a ti, el mejor espadachín del imperio, ¿no es así?»

«No me alegra que me defienda en un momento así.»

«Entonces, lo voy a hacer todos los días.»

«¿Todos los días tengo que ir a Heath con Su Alteza?»

Ignis sacó su mano y otra vez se encogió de hombros. Luego se tocó el mentón. Observó el rostro de Celestine con una mirada extraña.

«Como había dicho, me sorprendiste.»

Como siempre sentí, Ignis es un hombre que sin dudar muestra su afecto. Selena pensó eso y asintió con la cabeza.

«Así que, si dices que no iras, no te voy a cuestionar.»

Ignis apoyó su mano sobre el dorso de la mano de Celestine. Y luego le tomo la mano.

«Te dejaré decidir.»

Su mano siendo sostenida por él parecía muy pequeña, pero era un tacto diferente al que sintió de Letio un rato atrás.

Las manos de Letio expresaban que quería atarla, pero Ignis no. Si era algo, sería…

‘Anhelo.’

Selena pensó mientras sentía como ese tacto temblaba ligeramente.

«Si digo que no, ¿irá sólo?»

«¿Debería morir?»

«Podrías morir.»

Ignis no respondió. Ese silencio, le hizo pensar que Ignis sabía a lo que se refería.

¿Cuántos asesinos lo emboscarán camino a Heath? Luego de derrotarlos y dirigirse a Heath, ¿qué tan probable es que el gobernador de Heath no lo traicione?

Los pensamientos se acumularon y se enredaron.

«¿Algún apoyo?»

«Quizás pueda traer algunas sombras.»

«Fu, realmente me alegra que no seamos solo nosotros dos.»

Selena dijo suavemente y alzó ambas comisuras de sus labios.

Acomodó la mano que estaba siendo sostenida por Ignis. Y sostuvo el dorso de su mano con firmeza. Era como si quisiera tratar de calmar su temblor.

«¿Qué dirían las personas si yo, famoso por ser el mejor espadachín del Imperio, tuviera miedo de una cosa así y me acobardara?»

Lo que sea que elija, ya no puedo volver atrás.

De todas formas, decidí vivir con el nombre de Celestine, así que no puedo escapar.

En fin, ir a Heath será una buena oportunidad para evitar a Letio. No tenía opción.

«¿Quieres ir juntos?»

Ignis la miró incrédulo. Aun así, Selena sonrió y dio vuelta los ojos.

«Por supuesto, soy la mano derecha de Su Alteza.»

Ignis se mordió el labio inferior. Parecía intentar contener la sonrisa que se le estaba por escapar, Selena sólo podía pensar en ese momento que él era tierno.

«No.»

Ignis se aclaró la voz una vez y dijo.

«Sir no es mi mano derecha.»

Entonces reposó su mentón sobre el brazo de Celestine.

«Ahora eres mi amigo.»

La mano que acariciaba su brazo se sentía muy cálida. Los temblores que había sentido antes ya había desaparecido. Ahora estaba estable.

Al verlo así, Selena se tragó la sonrisa amarga.

Incluso cuando sepas que te estuve engañando, ¿me dirías eso?

No lo harás. Cuanto más creas en mi ahora, mayor será el sentimiento de traición.

Selena miró a Ignis, intentando borrar su amargura.

«Ahora, ¿deberíamos ir a ver a Evan? Quiero saludarlo después de tanto tiempo.»

Desconociendo los sentimientos de Selena, él sonrió alegremente y se levantó.

«Quizás este será el último adiós.»

¿Por qué exageras tanto? Selena murmuró, y se levantó.

***

Ignis caminaba lento, pisando el suelo de madera que crujía.

No tenía otra opción más que seguir a Celestine porque no conocía la estructura de la casa.

—Podrías morir.

Cuando Celestine dijo eso, su expresión era de pura preocupación. Que chico raro. ¿Te preocupas por mí?

De hecho, no suponía un gran problema si iba solo. Si le preocupaba algo, era el aburrimiento a la ida. Porque de todas formas no iba a morir.

Entonces le hice una propuesta a Celestine. ¿Pero qué es esto? ¿No se te notaba en la cara que te preocupaba que muera?

Así que Ignis no dijo nada más. Porque las palabras de Celestine eran extraordinarias, y también…

‘Gracias.’

Ignis pensó con una sonrisa sutil.

¿No se siente bastante bien? Alguien que se preocupe por mí. Nunca antes había habido alguien así.

Ignis se decidió.

Por el momento, fingiré ser débil en frente de Celestine.

Él dejó de lado sus pensamientos y le sonrió a Celestine, que se había dado vuelta.

«Te estoy siguiendo bien. No te preocupes.»

Mientras Ignis decía eso, se acercó a Celestine.

«¿Cómo se encuentra Evan?»

Selena alejó su vista por un momento y pensó en Evan.

Notas:

  1. Sombras:

Cuando Ignis habla de las sombras se refiere a los espías de él, que trabajan desde las sombras. Más adelante en la novela se vuelven a mencionar.
Hay que tener en cuenta que Selena no sabe que Ignis tiene poderes.

TL: mawi

No spoileen porfi (ɔ˘ ³ (ˆ‿ˆc)

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